BLOGGER TEMPLATES - TWITTER BACKGROUNDS »

Bienvenidos...

...A este espacio, de aquí saldrá todo lo que siento, lo que anhelo y lo que sueño por esa persona que ha sido importante en mi vida...

Éstos no son escritos profesionales, ni tampoco quiero hacerle de gran escritora, todo lo que se escriba aquí, vendrá de instantes de mi vida, de lo que me nazca; así que no esperen grandes palabras ni grandes frases, lo único que encontrarán serán sentimentos puros de todas las clases... absolutamente de todas las clases...

Bienvenidos de nuevo.

lunes, 2 de junio de 2008


El primer beso, fue fuego puro, caliente, húmedo, nunca había sentido esa sensación en mis labios, tan fuerte, tan penetrante...


Tu mirada en esa tarde, tus manos en mi cabello, tu cuerpo tan cerca del mío como muchas veces lo soñé desde que te conocí, podía sentir la ansiedad que tenías, creo que tú también sentiste la mía, parece que ambos ya esperábamos ese momento...


Admito que todavía hasta ese instante me negaba a aceptar eso que sentía por tí, a mí nunca me ha gustado traicionar, siempre he sido fiel a todo, y contigo fue la primera vez que lo hice: el temor, la adrenalina que sentía al poder tocarte, el saber que sólo por un día podías ser mío, fue lo que me hizo seguir ahí parada, contemplándote...


Esa tarde fue mágica, por eso adoro los días de noviembre, tan mágicos, pero toda tarde se tiene que acabar, y la nuestra estaba llegando a su fín, un rayo de ansiedad recorrió toda mi espalda, no quería que ese momento llegara, más sin embargo lo esperaba demasiado...


No me preguntes que estábamos hablando en ese rato, no lo recuerdo; lo único que sí logro recordar es que nos quedamos callados. Se hizo un silencio perpetuo entre nosotros, yo no quería mirarte, luchaba con todo lo que sentía, y si te miraba iba a caerse todo, pero tú alzaste mi cara, y entonces fue la primera vez que todo el mundo desapareció alrededor nuestro...


No había nadie más, sólo tú y yo, sin despegarnos la mirada. En ese momento, a lo lejos se escuchaba el reloj de la Iglesia, daba sus 5 campanadas, y como si alguien lo hubiera escrito, me besaste.


Cerré mis ojos y pude probar el dulce más delisioso, el calor más tierno, la caricia más suave, y cuando abrí los ojos, el mundo había regresado, y ahí seguíamos los dos...


No tuve más dudas, las peleas internas habían parado, fuego nuevo nacía en mi cuerpo, todas mis dudas dejaban de existir, en mi mente comenzaste a vivir y te multiplicaste en ella, había entendido perfectamente con quién quería estar, no por un tiempo, sino para toda la vida...


Hiciste tantas cosas en mí, en ún instante, y todo eso lo lograste sólo con un beso...


Con el beso más perfecto, creado sólo para tí y para mí...

0 plumas han caído: